CONSEJOS PARA ALMACENAR EL HIERRO

El acero es básicamente una aleación o combinación de hierro y carbono. Es unos de los materiales de fabricación y construcción más versátil y adaptable con la máxima durabilidad garantizando el mayor refuerzo para las construcciones y estructuras metálicas. 

¿Por qué debemos tener mucho cuidado al momento de almacenarlo? 

Las láminas, tuberías y perfiles si no son tratadas y almacenadas adecuadamente son sujetas a corrosión, por ello su cuidado es de gran importancia. 

El almacenamiento del hierro durante mucho tiempo puede causar la acumulación de humedad entre los paquetes causando la filtración de agua en los mismos y los desprendimientos de la pintura y la corrosión del metal.

¿Cómo lo podemos prevenir? 

Puede prevenirse reduciendo el tiempo de almacenamiento y/o almacenando el producto en un lugar seco y ventilado.

  • Los soportes de madera se deben colocar sobre una superficie plana. La parte superior de los mismos debe estar nivelada y a la misma altura. Esto evita que el producto se arquee. 
  • Al momento de almacenar el acero debes evitar que tenga contacto con el suelo.
  • Se debe proteger de la lluvia y de la humedad para evitar que se oxide. una excelente opción es cubriéndolo con bolsas de plástico.
  • Si el agua ya está presente en los paquetes se debe separar las unidades una por una y secarlas con un trapo suave y limpio. luego debes dejar un espacio entre cada unidad para que exista circulación de aire que pueda completar el proceso de secado. 
  • No debes soldar las barras para unirlas. El soldado altera las características del acero y lo debilita.
  • Si una barra se encuentra poco oxidada, puede ser usada en la construcción. Se ha demostrado que el óxido, en poca cantidad, no afecta la adherencia al concreto.
  • Un hierro oxidado no puede ser utilizado cuando sus propiedades de resistencia y de peso se ven disminuidas. Para determinar si podemos utilizar el hierro debemos seguir los siguientes pasos:

                    -   Verificar que el óxido es superficial solamente.

                    -   Limpiar el óxido con una escobilla o lija.

                    -   Revisa si el hierro mantiene el peso mínimo que exige la normal.

 

 


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